Balonmano Opinión

Historias de balonmano: El Maestro Valero Rivera

Cuando se tiene que escribir de determinadas personas ilustres, el respeto por no poder expresar con palabras lo que es la persona siempre aparece y más aún en este caso.

Valero Rivera López (1953) es uno de los grandes referentes del balonmano mundial de todos los tiempos.

Creo que lo mejor que podría definir a esta persona es que es puro ADN balonmanístico. Tanto es así que ha sido capaz de transmitir a su hijo Valero Rivera Folch (1985) esta pasión por el balonmano y la genética para convertirse en un jugador referente en el balonmano actual. Su difícilmente igualable trayectoria deportiva comienza en su faceta de jugador de campo.

Formado en la cantera del FC Barcelona, cosechó innumerables éxitos, en los que cabe destacar su primera Copa al año de su debut en la máxima categoría del balonmano español. Le acompañarían dos más, tres ligas y dos ligas Catalanas.

Cuando decidió retirarse como jugador profesional seguro que no pensaba que su futuro como entrenador de balonmano iba a comenzar tan pronto y con tanta responsabilidad.

Sin apenas tiempo para plantearse su futuro como entrenador, le llega la primera propuesta de FC Barcelona para ser segundo entrenador y ayudante del maestro Sergi Petit. Una oportunidad de aprender de uno de los grandes técnicos del momento que no rechazó.

Después de aceptar la oportunidad, no podía suponer que el destino le reservaba otra sorpresa. El técnico Sergi Petit estaba siendo fuertemente cuestionado por los seguidores blaugranas (se dice que también dentro del vestuario) ya que su equipo no lograba transmitir la seguridad de un líder y menos en una época donde la rivalidad con el At. de Madrid era algo sagrado para la afición culé. Unas tibias declaraciones previas y seguidamente la derrota frente al rival por excelencia, provocaron su cese. Mediada la temporada la solución provisional de que el segundo entrenador se hiciera cargo del equipo era la más lógica.

Lo que nadie podía prever, ni siquiera él mismo, es que esta interinidad durase 12 temporadas y llevase al club a la época más grande hasta este momento.

Para su historial y el del club quedaron 12 ligas ASOBAL, 10 Copas de Rey, 11 Supercopas a nivel nacional y 6 Copas de Europa, 5 Recopas, 1 Copa EHF y 5 Supercopas de Europa a nivel continental como “monstruoso” currículum.

Los que les conocen dicen de él que es un hombre exigente y perfeccionista hasta lo obsesivo. Sus detractores le critican por ser distante con sus jugadores e imponer una disciplina férrea y un control exhaustivo de sus jugadores. Lo cierto es que cuando el llegó al balonmano de élite algo cambió y el FC Barcelona que no era capaz de mantener un liderazgo estable en el tiempo, pasó a ser un claro dominador nacional (nada que ver aquellas ligas con la actual… por desgracia) y un permanente outsider a nivel continental. Para el estudio quedan esas defensas en 5:1 con un magistral Iñaki Urdangarin en el central en la primera linea defensiva y un trabajo de avanzado con Oscar Grau o Xavier O’Callaghan en la segunda linea defensiva. Tambien el juego ofensivo del central en sistemas 3:3 con un magistral Enric Masip o el mismo Xabier O’Callaghan.

Sus detractores puede decir que es mucho más fácil conseguirlo en un club como el FC Barcelona, pero su labor como formador de jugadores y descubridor de talentos también es inigualable.

Este estudioso del balonmano y de dedicación absoluta, fue capaz de encumbrar a míticos jugadores como Eugeni Serrano, Joan Sagalés, Oscar Grau, David Barrufet, Iñaki Urdangarin, Enric Masip, Rafael Guijosa, Fernando Barbeito, Antonio Carlos Ortega, Xavier O’Callaghan, etc. algunos de ellos considerados referentes mundiales de su época.

Además la gestión en los fichajes de refuerzo a la ya de por sí excelsa plantilla, como Erhard Wunderlich, Veselin Vujović, Tomas Svensson, Bogdan Benta, Andrei Xepkin, etc. dicen mucho y bien de su gestión como responsable técnico y conocedor del balonmano mundial. Cualquier deportista podría considerarse satisfecho y “consolado” con su trayectoria.

Pero eso no entra en una mente absolutamente apasionada por el balonmano como la de nuestro ilustre personaje. Por eso, ante la propuesta de la Federación Española de Balonmano también aceptó el reto de pasar por la piedra de toque de tener la máxima responsabilidad del equipo nacional. Una tarea nada fácil habida cuenta de la situación en la que se encontraba la selección nacional, el lejano mundial conseguido en el 2005 y el carácter de nuestros compatriotas.

Si aún le quedaba algún detractor, su palmarés con la elástica nacional termina de acallar esas minoritarias voces. Una medalla de oro y otra de bronce son suficiente aval. Por si fuera poco lo conseguido, y parece que sí para esta inconformista y perfeccionista personalidad, decide aceptar la propuesta de la Federación de Catar y asumir el reto de liderar un proyecto que sirva tanto para impulsar el balonmano catarí como en esa zona del mundo.

Y ante la sorpresa del balonmano mundial (aunque no la de sus rendidos seguidores, entre los que me cuento) consigue conformar un combinado que es capaz de ascender desde la nada balonmanística hasta la plata mundialista. Y como aún sigue en activo, no les quepa duda que todavía nos dará más alegrías a sus seguidores y al balonmano mundial, además de seguir engrosando el currículum de este animal del balonmano. Esperamos con muchas ganas e ilusión los próximos compromisos de la selección catarí.

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