Los Gigantes dieron un paso más a los juegos de postemporada; con una victoria de 17-6 sobre los Leones, su paso es cada vez más sólido y el golpe de autoridad hacia la liga los mantiene como uno de los equipos que darán mucho de qué hablar dentro de unas semanas; con base en el accionar de su unidad defensiva, los “G Men” dieron otra demostración de control del juego, se han convertido en una de las mejores unidades en la zona roja.
En esta ocasión sólo permitieron seis puntos del conjunto de Detroit, escuadra que se había caracterizado por ser una amenaza constante para conseguir puntos y uno de los equipos más peligrosos en el último cuarto, los Gigantes no permitieron que su ventaja y la ventana de oportunidad que aún se encuentra abierta se escapara.
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Equipo |
1 |
2 |
3 |
4 |
Total |
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Detroit 9-5 |
0 |
3 |
3 |
0 |
6 |
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New York 10-4 |
7 |
3 |
0 |
7 |
17 |
Con un Eli Manning más concentrado y dispuesto a cuidar el ovoide, sus envíos fueron certeros la mayor parte del juego; la protección de su línea ofensiva le ayudó a completar la misión; recibió el aporte de sus confiables receptores Sterling Shepard y Odell Beckham Jr. quienes se combinaron para las dos anotaciones del juego.
El juego terrestre del equipo de la “Gran Manzana” fue determinante para reducir en cierta medida la presión hacia el pasador neoyorquino.
Desde el comienzo del juego los Gigantes saltaron al emparrillado con la misión de controlar las trincheras y evitar que los Leones avanzaran el balón a placer; con un Matthew Stafford disminuido por la lesión en su dedo medio, el equipo de Detroit batalló para poder avanzar.
La mala suerte hizo mella en una serie que parecía podría brindarles puntos a favor, cuando un golpe defensivo hacia el corredor Zach Zenner cerca de la zona de anotación provocó el fumble que recuperó la defensiva para conseguir el touchback e impedir puntos en su contra.
Los primeros puntos para el conjunto de Detroit llegaron hasta el segundo cuarto, con un gol de campo de 48 yardas del pateador Matt Prater, quien los mantenía dentro de la pelea y a tan sólo cuatro puntos de distancia. Los Gigantes reaccionaron al embate y su ataque respondió al llevar el balón hasta la zona roja de nueva cuenta.
La suerte parecía estar del lado de los locales; un fumble fue recuperado en la zona de anotación de los felinos por el receptor Víctor Cruz; sin embargo un castigo de sujetando evitó que consiguiera el touchdown y en esta ocasión el veterano pateador Robbie Gould aportó un gol de campo de 47 yardas para ampliar la ventaja a 10-3 y los equipos se fueron al vestidor para el medio tiempo.
El ambiente en el estadio era tenso, a pesar de la ventaja el peligro de sus oponentes se sentía en el campo de juego; los felinos respondieron con otro gol de campo, en esta ocasión de 48 yardas para acortar la distancia a cuatro puntos. Los Gigantes conocían el peligro que significaba el tener un marcador cerrado; fue en ese momento cuando su defensiva de nueva cuenta levantó la mano para calmar el peligro, la presión empezó a surtir efecto y los visitantes no lograban conseguir el primero y diez y eran obligados a patear.
La magia del receptor Odell Beckham Jr. se hizo presente con una espectacular recepción a una mano que les dio la ventaja definitiva y su defensiva coronó el esfuerzo nuevamente al interceptar un pase en la zona de anotación cuando el veterano esquinero Dominique Rodgers Cromartie, robó el balón y apagó cualquier intento de reacción de los Leones.
(Fotos: AP.COM)
Héctor Salinas
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